Este proyecto tiene varios objetivos: en primer lugar, sirve como herramienta de dinamización social de una plaza (ensayado en Vartov Square, Copenhague). En segundo lugar, es un dispositivo de captación energética que a la vez expresa la cultura de la sostenibilidad y de las energías renovables. Finalmente, se trata de una instalación que convierte la energía del viento en energía eléctrica que abastece las distintas actividades que tienen lugar en la plaza.
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-Como elemento de dinamización social, se propone una serie de mesas-artefactos tecnológicos de grandes dimensiones que cuelgan de una red de cables de acero inoxidable. Sirven a diversos usos que de forma espontánea pueden utilizar los ciudadanos: almorzar, improvisar un concierto, dormir una siesta, dar un discurso y hasta organizar un teatro de marionetas para niños.
-Cultura de la sostenibilidad: el dispositivo capta la energía del viento para poder dotar de energía a todas las actividades que se programen (sonido, visuales…). Dependiendo de la intensidad del viento en cada momento el público percibirá cómo la intensidad de la iluminación se incrementa o disminuye en tiempo real. Además, hay un jardín colgante de macetas con margaritas que reproducen el color de las luminarias en una transición del amarillo al rojo.
-Una fuente de energía renovable: la energía utilizada en la plaza se basa únicamente en la energía eólica. La adquisición de energía eólica se produce a través de un sistema patentado llamado Windbelt que transforma la vibración producida por la presión del viento en una tira de acero en energía eléctrica. Además, existen una serie de baterías y otros equipos de suministro que garantizan la prestación de energía. Existe la posibilidad de abastecer a vehículos eléctricos que se conectarían directamente a la red. Con las dimensiones de este proyecto se pueden obtener hasta 2.688 kw / h.
